El Pasado 27 de Abril, Samu, Javi, Pepe, Txule y yo
(Antonio) nos dirigimos a la localidad de Riopar (Albacete) para disputar el II
Trail de Montaña “El Desafío Lurbel” el calar de Río Mundo.
Como la salida era a las 8:00 de la mañana, nos desplazamos tranquilamente
el día anterior para poder coger los dorsales, ver el ambiente que había en la
Plaza del Ayuntamiento, escuchar las charlas técnicas que la organización había
preparado, saludar a conocidos y porque no…. también dar una vueltecita por el
pueblo que en ese momento tenía un gran ambiente, tanto de corredores como de
familiares que se habían desplazado con estos también a disfrutar de este
evento.
A las 7:45 nos hacían en control de material, en este caso,
sólo Chubasquero y Agua y a las 8:00 como un reloj salimos los corredores
dispuestos a afrontar este gran desafío.
A primera hora de la mañana hacía un poquito de fresco, pero
enseguida que enfilamos la primera cuesta a la altura del segundo kilómetro
enseguida empezamos a quitarnos los cortavientos para poder afrontar las
primeras subidas sin tener que preocuparnos por el calor.
En seguida empezamos a dirigirnos hacía la base de la subida
al pico del “padroncillo”, el primer pico importante de los que vamos a subir
y….. Sorpresa, hay dos pasos en los que la organización ha puesto una línea de
cuerda para que podamos pasar sin problemas, pues tenemos que pasar uno a uno
por este punto y el riesgo de caída es muy importante, ya que las piedras
estaban resbaladizas y no había muchos puntos donde poder poner las manos para
poder tener una buena sujeción. La adrenalina se pone por las nubes pero una
vez que pasamos este punto, enseguida vemos como poco a poco nos vamos
aproximando hacia las antenas de televisión, punto que nos indica que hemos
conquistado por fin la cumbre de este primer puerto que tras un sencillo
descenso, por un camino forestal enseguida nos desvían hacia una senda mucho
más divertida donde nos tenemos que emplear a fondo con los talones y derrapar
en todas las curvas pues el terreno tenía arena y gravilla suelta. No obstante,
es muy divertida y una vez pasado este punto, enseguida nos encontramos con el
primer avituallamiento.
Tras reponer fuerzas y beber un poco de agua, una senda
entre pinares nos va bordeando por toda la zona donde se encuentra el
nacimiento del rio mundo, pero esta vez, la organización no nos ha llevado por
el nacimiento, pero esto no le merece ningún descredito al resto de los
paisajes por los que nos han llevado.
Desde este punto nos
dirigimos hacia el segundo pico importante de la ruta, el llamado “Tenada de
los Pastores”, en este punto como íbamos todos juntos teníamos que ir andando, además de que la
inclinación que tenía el terreno no invitaba nada más que a tomártelo con
tranquilidad y esperar a que el ascenso terminase para poder empezar a intentar
correr un poco más.
Una vez que terminamos este ascenso nos encontramos con un
descenso a través de una senda donde aprendimos todos a dar saltos, girar
tobillos, bordear ramas durante unos 4 kilómetros aproximadamente y a partir de
este punto, llegamos al kilómetro 21 donde estaba el segundo avituallamiento a
la altura “Casas de Noguera”. En este punto es donde al ver los impresionantes
chorros que salían de los manantiales donde nos pusieron el mismo tuve que beber
más agua de la cuenta y es donde empecé a sentirme un poco mal. Aun así,
conseguí llegar hasta el kilómetro 27 donde le dije a Jesús que no me
encontraba bien y que prefería dar media vuelta por el camino recorrido y
volverme hasta el pueblo. No obstante a pesar de esto, me salieron 33
kilómetros en el GPS. Me bajé con unos “Andarines” que venían desde Alicante a
realizar la prueba para nos bajar sólo y deje a Jesús que continuase con el Desafío hasta el final.
Me jorobo que al cabo de unos kilómetros y gracias al Ibuprofeno que me había
dado Jesús me encontraba bien, pero ya era demasiado tarde como para volver a
remontar lo andado y además luego los demás me dijeron que era lo mejor que
había hecho, pues a partir de Riopar Viejo era otra carrera no de montaña sino
de escalada. Llegue al pueblo cuando estaba entrando el segundo clasificado y
me fui rápido a ver al resto de compañeros como iban entrando en Meta, primero
Samu, al que le dio mucha alegría verme y lo que le grite para que consiguiera
acabar la última subida, luego Pepe,
Javi al cabo de un rato por fin veo aparecer a Jesús con una sonrisa de
oreja a oreja tras 8 hora y media de carrera.
Muy buenas sensaciones y por supuesto, otro reto al que
tengo que volver para terminarlo.
ANTONIO LOPEZ